El buen segundo cuarto no basta a un Hestia Menorca que pelea de tu a tu al Albacete y cede en los últimos compases (58-60)

Qué cerca estuvo la primera victoria y cuánto lo mereció el Hestia Menorca. Sobre todo por el trabajo coral en el segundo cuarto (22-4). Pero un mal tercer cuarto (13-20) ligado a un último acto en el que no acompañó la fortuna en la selección de tiro derivó en la cuarta derrota seguida.

Un triple de Adrián Méndez se encargó de abrir el espectáculo seguido de una canasta de Matalí para un esperanzador 5-0 de salida que obligó al técnico visitante, Alfredo Gálvez a pedir tiempo. Surtió. Esa ligera ventaja inicial la noqueó el Albacete percutiendo en la pintura.

Los primeros diez minutos se diluyeron en un ajustado tanteo en el que el Hestia Menorca se mostraba muy acertado en la línea de personal y en el rebote defensivo, principal virtud de los visitantes en lo que va de campeonato. La igualdad se mantuvo hasta el 16-16 con el que se cerró el primer acto.

El ritmo del partido bajó considerablemente en el inicio del segundo cuarto. De hecho, el parcial pasados los 5 minutos era de 9-2 (25-18). Pitu tomó el mando, repartió juego superando a su par y colocando dos triples y una canasta que abrían brecha (34-18).

El capitán era la referencia y Pack, con 10 puntos, era el estilete en ataque, aunque el trabajo defensivo global a un Albacete sin argumentos en ataque –por entonces había fallado los 10 intentos de triple- propiciaba un espectacular 22-4 (38-20) al descanso.

No bajó los brazos el Arcos Albacete, quién salió en tromba con un 2-9 que los acercaba (40-29) mientras el Hestia Menorca se cargaba rápidamente de faltas. Davis y Rudolph, con 6 puntos cada uno se aprovechaban de la pájara menorquina para recortar hasta el 42-35, a 4:54, que obligaba a Oriol Pagès a pedir tiempo muerto.

Fotografía: Antxón Castresana

El cambio de estrategia no bastó y la herida en defensa seguía abierta. El Albacete merodeaba la igualada en el electrónico devolviéndole al Hestia Menorca el parcial 6-20 (43-40).

Cuando peor estaban las cosas, la garra, el coraje y el talento de Xavi Hernández con un triple y una canasta, y un 2+1 de Fitz dieron vida al equipo y despertaron a las más de 1200 personas que se dieron cita en el Pavelló y ligado a una defensa asfixiante sirvieron para tomar oxígeno al final del tercer cuarto (51-40).

Los últimos diez minutos empezaron con mejor sintonía del Albacete que de nuevo fue capaz de recortar (55-52) lo que provocó que Pagès devolviera a pista a Pitu para que diera descanso a Xavi Hernández.

La remontada culminó a 2:43 con una canasta de Rudolph que puso por delante a los visitantes (55-56) por primera vez desde el primer cuarto. Ese golpe afectó moralmente a un Menorca que lo intentó con un triple de Xavi Hernández ‘in extremis’ pero se quedó en la orilla y que deberá esperar una semana más para sumar su primer triunfo (58-60).