Vamos que nos vamos, grandes que sois muy grandes. No importa el rival, la hora, ni el frío polar. Respondéis como siempre y más, no hay escenario más gélidamente acogedor que el Pavelló Menorca. Y es “culpa” vuestra, cada día somos más y mejores. Ante el Quart rozamos el millar de asistentes y sumamos la quinta victoria consecutiva (68-61) –quinta también seguida en condición de local- para mantenernos en la tercera plaza –a falta de algunos partidos pendientes de rivales directos-, para no perder la estela de El Masnou y Bàsquet Girona y para cerrar el año 2017 en casa con el buen sabor de boca que deja otro triunfo conseguido desde el esfuerzo colectivo, el crecimiento desde la defensa cuando el ataque se atasca por la propuesta física y agresiva del adversario y la comunión indisoluble equipo-afición.
El Quart fue, como esperábamos, otro rival duro de roer, al que además otorgamos durante la primera parte ciertas ventajas en ataque, que les permitieron generan situaciones de tiro cómodas para su línea exterior, que no perdonó (casi un 65% en tiros de dos). Aun así, cerramos el primer parcial metidos en harina (16-19). Sin embargo, el déficit en nuestra zona se trasladaba luego a la pintura rival, donde no lográbamos imponer nuestra teórica superioridad. El equipo dirigido por Carles Ribot, conocedor lógicamente de la situación, se cerró en continuas situaciones de dos y tres para uno, defensa muy física y de contacto, que nos costó leer para sacar ventaja en el equilibrio exterior-interior que reclamaba nuestro técnico Oriol Pagès en la previa del partido.
Eric Jiménez, como era de esperar, canalizaba un alto porcentaje de la ofensiva gerundense, bien secundado por Pau Vila. Un parcial de 0-9 permitió al Quart alcanzar una máxima ventaja de 10 puntos (23-33), situación que conseguimos ajustar en los últimos 120 segundos para llegar al intermedio con un menos abrumador (30-36, parcial 14-17).
El tercer cuarto apenas sirvió para invertir la dinámica en ataque, pero sí para marcar más y mejor la pauta en defensa. Dani, Jan y Matalí convertían los puntos suficiente para ganar el parcial (16-15) y dejar abierto el partido para unos últimos diez minutos en los que entramos decididos a darlo todo (46-51). Una lectura fría –nunca mejor dicho- y rápida de lo acontecido en el último cuarta se puede hacer desde la valoración de este parcial: Bàsquet Menorca 34, Quart -5.
Pero no resultó tan cómodo darle la vuelta al marcador, aunque sí a medida que pasaban los minutos y las posesiones, nuestro equipo se sentía más metido, cómodo y confiado en un desenlace favorable del partido. Jan y Matalí siguieron percutiendo sobre el aro rival y apareció la figura de Quim Salvans tanto para asistir, como para ejecutar desde el tiro libre cuatro series (6/8) con mejor porcentaje que la media del conjunto de todo el partido, rematado con acciones puntuales de Dani ‘Maki’ García (triple) o Biel Torres.
Todo, sin embargo, a partir de una defensa sin concesiones al Quart, dominadora del rebote (especialmente ‘Pulpo’ Matalí con 15 rebotes, 13 defensivos, y autor de un nuevo doble-doble) y que dejó en apenas cuatro canastas en juego al adversario, sobre todo con bajos porcentajes en relación a la primera parte (3/9 T2, 1/6 T3). Conclusión: antes del ecuador del último periodo firmábamos un demoledor –por anímico- parcial de 12-0 para darle la vuelta a la ‘tortilla’ (de 46-53 a 58-53) y adquirir una ventaja suficiente que desde la correcta gestión de las posesiones definitivas derivó en el 68-61 final (parcial 22-10).
Agradecer la presencia de los representantes del municipio de Sant Lluís, tanto de las autoridades, como integrantes del premini del CCE Sant Lluís liderados por Toñi Soler y Aleix Fuxà y resto de colectivos, socios y seguidores de la localidad, a quienes dedicamos la jornada festiva de este partido.
El siguiente compromiso, y último de 2017, nos llevará de nuevo a tierras catalanas para enfrentarnos al Castelldefels, en su pista, el día 17. Una vez más necesitaremos de la presencia y apoyo de los menorquines en Catalunya para intentar cerrar el año con el mejor sabor de boca posible: la que nos dejaría una nueva victoria. ¡Os esperamos!