Quim Salvans muestra su lado más personal y comparte sus sensaciones propias de un veterano… de solo 20 años, muy ligado al proyecto Hestia Menorca.

Quim Salvans es uno de esos ‘rara avis’ en el deporte profesional. Deportistas que rinden al alto nivel que exige el profesionalismo y compaginan el tiempo libre que les queda con los estudios creciendo, paralelamente, en su carrera deportiva y académica. Reservado, propio del que apenas tiene 20 años, el catalán formado en las filas del Sant Josep y Joventut de Badalona tiene las ideas muy claras, se siente muy menorquín desde el primer día y avisa: “A base del esfuerzo te vas construyendo tú mismo el objetivo, nadie te regala nada”.

Es de los veteranos, dos temporadas ya en Menorca, ¿cuáles son las sensaciones?
Mi adaptación, desde el principio, fue excelente porque me sentí y me siento menorquín desde que llegué. Llevo 3 años seguidos viniendo en verano porque desde el primer momento me encantó. Eso me ha ayudado a creer en el proyecto del Hestia Menorca y a crecer en lo personal.

¿Te imaginabas, ese primer verano, volver y jugar en LEB Plata aquí?
No. En ese momento no había acabado mi etapa júnior pero sí que cuando vine a jugar con el Arenys en EBA contra el Menorca en Sant Lluís y vi a tanta afición en un pueblo tan pequeño me di cuenta de que se estaba cociendo algo muy bonito. Ya conocía el espíritu de Menorca con el baloncesto del tiempo en el que hubo ACB y LEB Oro, pero aun así me sorprendió. Esas ganas fueron un aliciente muy grande cuando recibí la propuesta.

Imagino que el hecho de jugar en el Pavelló, cuna de la ACB, debió ser otro aliciente.
Sin duda, fue una de las primeras cosas que me comentaron y cuando llegué a la Isla fue lo primero que me enseñó el club. Me impactó la oportunidad que se abría ante mí. Está siendo una experiencia muy buena.

A nivel competitivo, ¿qué ha cambiado del año pasado, en EBA, a este, en LEB Plata?
Sobre todo el tema físico. Tácticamente se nota que los equipos están más entrenados y el ‘scout’, mientras en EBA se hace un poco por encima, ahora se nota que se trabaja mucho más.

A nivel personal, ¿cómo te encuentras en Menorca y con el Hestia Menorca?
Es mi primer año en LEB y me estoy adaptando porque sabía que no era fácil, pero las condiciones que pone el club son estupendas, está yendo genial, y los jugadores nos sentimos unos privilegiados y muy cuidados. No hay nada que reclamar.

¿La plantilla es consciente de la gran masa social que se está moviendo?
En el primer partido en EBA del año pasado, ya vi que había mucha hambre de baloncesto y ver cómo se llena el Pavelló Menorca en cada partido y cada vez hay más gente, te das cuenta de la importancia que tiene representar esta entidad, no solo a nivel deportivo sino también social ya que somos un claro ejemplo para transmitir valores a los más pequeños.

¿Cuál es tu valoración una vez pasado el ecuador de la LEB Plata?
No empezamos bien, nos costó mucho ponernos por delante, empezábamos a remolque y ya ha habido un cambio de chip y hemos aprendido muchas cosas. Defensivamente hemos dado un paso al frente, que era lo que queríamos, y esa es la línea a seguir de cara a los partidos que vienen.

¿Hacia dónde tiene que mirar este proyecto?
Todos tenemos claro que acabar entre los 6 primeros supondría la permanencia y luego, luchar al máximo para ver dónde llegamos. Todavía queda mucho por jugar y por eso cada uno de los partidos que nos quedan hemos de tener claro todos que el objetivo es acabar entre los 6 primeros. Y vemos que la gente es ambiciosa y también quiere que luchemos por ese objetivo.

Que te viene a la cabeza cuando escuchas #matealestigma
#Matealestigma es un proyecto con la finalidad de entender que hay personas con problemas de salud mental y que el deporte es una buena herramienta para ayudarles. El mate, todo el mundo lo conoce y es una buena metáfora, por así decirlo, para entender que hay un problema en la sociedad que se debe trabajar.

El deporte es una herramienta que nos ayuda en la vida. Nos ayuda a abstraernos de nuestro alrededor y creo que todo el mundo debería practicarlo para alejarse de problemas y situaciones a tratar. Para mí es lo mejor que hay en mi vida. Cuando piso el parquet sólo me focalizo en jugar, en dar el máximo, los problemas se alejan y en este caso me relaja.

Hablar de problemas de salud mental es un tema bastante tabú en la sociedad ahora mismo. Los deportistas tenemos vida privada, y por supuesto todos los deportistas, no hay ninguno que se libre, tenemos preocupaciones y problemas, creo que la sociedad no esta muy concienciada sobre ello. Los psicólogos están trabajando mucho con clubes de elite, y los deportistas fuera de sus clubes son gente normal, como todo el mundo y padecen de problemas psicológicos.

Fotografía Foto Nueve

Qué diferente es la Menorca de verano de la de invierno… ¿Cómo has vivido ese cambio?
Al estar estudiando la carrera de Comunicación me ofrece mucha tranquilidad y me supone un punto extra para estar contento porque estoy en un lugar que me permite compaginar mi carrera deportiva con la carrera académica. Menorca es un sitio ideal ya que hay mucha tranquilidad y me ayuda a desconectar los días de descanso. Me siento muy adaptado en el ambiente de la Isla, me encanta visitar alguna cala, pasear por el centro de Mahón me relaja…

¿Qué es lo que más te ha impactado de Menorca?
La gente. Puedo afirmar sin dudas que la gente de Menorca es un ‘10’ como personas. No he conocido a nadie que no pueda decir esto. Los menorquines son de las mejores personas que he conocido nunca, me han sorprendido en todos los aspectos y es algo que descubrí desde el primer momento.

En el plano persona, ¿cómo es Quim Salvans fuera de la pista?
Me gusta mucho estar con mis amigos, tener contacto con gente cercana, con la familia… Me gusta estudiar, formarme, estoy en plena carrera de Comunicación y tengo pensado hacer algún máster para complementar los estudios. Me gusta tener una vida normal.

¿Tiene algún sueño o ambición?
Me gusta ir poco a poco, trabajar cada día dando lo máximo de mí y lo que tenga que venir, ya vendrá. Al llegar no imaginaba que estaría en mi segundo año jugando en LEB Plata jugando en un Pavelló lleno hasta los topes. Es una de esas cosas que te encuentras a la larga a partir del trabajo. A base del esfuerzo te vas construyendo tu mismo el objetivo, nadie te regala nada.