Pablo González Longarela se fue hasta los 25 puntos en un encuentro en el que ambos equipos ofrecieron competitividad y calidad
Partido denso y aguerrido el que ofrecieron Pinta Bé Es Castell y Hestia Menorca en el pabellón de la Zona Esportiva Sergi Llull, que al final se acabó llevando con un amplio margen el equipo visitante (62-81), a pesar de que los locales sacaran su mejor versión y plantaran cara en muchos minutos del choque.
El encuentro comenzó bajo el guion esperado, con un Hestia que llegó a distanciarse en siete puntos con el acierto de Maxime Yomi, Joshua Tomaic y Pablo González Longarela justo al inicio, pero que poco después colapsó, en gran parte, gracias al acierto de un viejo conocido por la afición visitante: Biel Torres.
El ex jugador del Hestia estuvo impecable en el tiro y se apoderó de la responsabilidad ofensiva del equipo, hasta conseguir empatar el partido a 13, aportando 11 de esos puntos. En ese instante, Javi Zamora vio necesario frenar la euforia local con un tiempo muerto y lo aprovechó también para volver a sacar a Álvaro Sanz a pista, quien aportó más ritmo al juego y otros 5 puntos seguidos que fueron esenciales para llegar al segundo cuarto con ventaja de 6 puntos (17-23).
El segundo parcial daba inicio con un buen triple local a manos de Laurent Bogon inmediatamente respondido por Longarela, quien se iba a convertir en el protagonista de la noche agrandando su figura a medida que pasaban los minutos. Una técnica provocada por Carlos Sintes, otro ex integrante del Hestia, derivó en varios minutos de euforia para los chicos de Zamora, aunque no muy extendida en el tiempo.
Un gran Christian Hernández se encargó de aportar criterio y varias canastas para acercar a cuatro al Pinta Bé, pero Alex Tamayo, con un mate potente ponía el punto de exclamación del Hestia, en el que hasta ese momento había sido un partido espeso y de mucho contacto.
Al tiempo muerto solicitado por Gino Rovellada se llegaba con la renta de seis, misma que con la que se llegó al final del anterior cuarto. Sin embargo, la figura del ya mencionado Longarela volvería a emerger en los cuatro minutos restantes del período, además de las buenas aportaciones de Popic en la pintura y otra buena entrada a canasta de Tamayo, para cerrar la primera mitad con 11 puntos y sólo un fallo en el tiro de tres.
Al descanso se llegaba con el resultado de 32-44, aunque las sensaciones en la entrada a los vestuarios de ambos equipos eran contradictorias. El Pinta Bé se daba por satisfecho momentáneamente con el juego desplegado, mientras que el Hestia necesitaba ajustar varios factores para los segundos 20 minutos de choque restantes.
Y así lo hizo. La intensidad defensiva, con presión a toda pista y ayudas sobre el hombre con balón, escaló al nivel ya demostrado en los anteriores partidos amistosos disputados, forzando que al Pinta Bé le costara más pasar a campo contrario y restando segundos de posesión, los cuales fueron clave para en varias ocasiones sonara la bocina de los 24 segundos antes de que los locales pudieran lanzar.
De hecho, en los primeros tres minutos del cuarto, el Hestia consiguió poner otros seis puntos de margen con una racha de 2-8. La entrada de Carlos Sintes a la cancha hizo que se cometieran varias faltas sobre él, dado a su agilidad y velocidad de arranque, y el Hestia entró en bonus muy temprano. Aun así, Longarela volvería a ser el factor determinante del partido, con otros seis puntos y tres rebotes en menos de cinco minutos para llevar el partido a su último parcial con 44-60 reflejando en el luminoso.
Los últimos diez minutos fueron bastante parecidos a los anteriores, con buena intensidad defensiva y muchas faltas de ambos equipos, incluso con varios momentos de tensión en los que se pudo ver a algunos jugadores encarados.
Comenzó mucho mejor el equipo casteller, con puntos de José Cepeda, Rafa Gómez y Christian, quienes consiguieron rebajar la ventaja a menos de diez tantos. No obstante, el Hestia volvió a coger vuelo con cuatro puntos de Tamayo, seis de Diego Alderete y otros ochos de Longarela, con dos triples que sentenciaron el encuentro y le consagraron como el mejor jugador de la partida, acumulando 25 puntos.
El partido concluyó 62-81 en la que fue una gran velada y celebración de baloncesto en la Isla entre dos equipos de distintas categorías pero que ofrecieron competitividad y calidad en todo momento a los muchos espectadores que abarrotaron las instalaciones de la Zona Esportiva Sergi Llull. Al término del partido, Javi Zamora hacia la valoración de su equipo: “Ha sido un partido que nos ha servido para completar el ciclo de acumulación de este momento de la pretemporada. Tenemos que agradecer a Es Castell su invitación, les ha quedado un pabellón sensacional y seguro que este año tendrán una gran temporada. Tenemos que seguir trabajando y mejorando, hemos pasado el ecuador de la preparación y ahora es momento de ir afinando