El conjunto menorquín quiere plasmar en Pumarín el trabajo de la semana con la plantilla al completo y encajar las piezas que le permitan conseguir el primer triunfo a domicilio.
El duodécimo asalto de la temporada 2023/2024 en la LEB Oro lleva al Hestia Menorca dirección Asturias para enfrentarse al Alimerka Oviedo Baloncesto en un momento de máximo compromiso y conjunción en el equipo menorquín, que sigue manteniendo la mentalidad ambiciosa y continúa centrado en el objetivo de la salvación.
Después de la derrota en casa del pasado fin de semana contra HLA Alicante, el cuadro de Javi Zamora, dolido por la racha de resultados adversos, no ha tardado en ponerse el mono de trabajo y usar ese resquemor como una fortaleza para afrontar el siguiente partido, siendo éste de vital importancia para recoger los frutos de una dedicación que, en las últimas semanas, no ha obtenido recompensa.
“Sabíamos de la dificultad de la Liga y del calendario, aparte de esas pequeñas cosas que nos han ido sucediendo. El equipo, emocionalmente, necesita el refuerzo de una victoria cuanto antes para poder encadenar un periodo de optimismo y de refuerzo al trabajo que están haciendo”, apunta el técnico madrileño en la rueda de prensa previa al choque.
Una “ola” de esperanza de la que no se han bajado los seguidores menorquines y que da aún más fuerzas al grupo: “La afición está dando nuevamente una muestra de resiliencia, de empuje y de cariño. Estoy, no solamente agradecido, sino muy abrumado por todo el cariño que estamos recibiendo de un montón de aficionados que han sido también parte responsable del éxito de la temporada pasada y que, ahora que los resultados no están acompañando al equipo, siguen empujando”.
Convencido de que esos ánimos están haciendo “trabajar de una manera adecuada” a su plantilla y con la fe de que, más pronto que tarde, también serán clave para “ganar partidos y recuperar ese espíritu” de confianza y optimismo, Zamora ha centrado esta semana completa de trabajo en recuperar a la totalidad de los jugadores, después de la frenética sucesión de tres partidos sin descanso.
“Como grupo, está siendo una semana muy importante, porque es la primera vez desde que iniciamos la temporada que tenemos a todos los efectivos disponibles. Estamos trabajando en tratar de engranarnos y enfocarnos en nosotros mismos para poder optar a competir y sacar una victoria fuera de casa, que nos hace falta”, añade el entrenador y director deportivo del Hestia Menorca.
La vuelta de Clevin Hannah a la dinámica del equipo, más la total recuperación de Víctor Arteaga, la readaptación de Eric Demers en su tercera semana con el grupo, el acoplamiento de Tom Digbeu al vigor físico óptimo y la llegada en forma de refuerzo temporal de Oliver Stević, revitalizan y estimulan el carácter competitivo del colectivo antes de desplazarse para otra oportunidad más de crecer en la competición.
Alimerka Oviedo espera al cuadro insular en Pumarín con la intención de seguir afianzando su posición en la tabla, mantenerse alejado de la zona de peligro y continuar acechando los puestos de PlayOff: “Es un rival que está haciendo las cosas de una manera excelsa. Han hecho un arranque de temporada brillante, con grandísimos partidos, jugando un baloncesto muy coral y que siempre en su casa son muy duros”.
El equipo asturiano cuenta con “grandes focos” de anotación y referencias en el juego ofensivo, como Josep Pérez, Demetric Horton o Marc Martí, entre otros. “Momento dulce” el que están atravesando los pupilos de Javier Rodríguez, con una racha de tres partidos consecutivos ganados; el último, en Sevilla ante el Real Betis Baloncesto.