Los menorquines vuelven a casa después de dos jornadas seguidas alejados de la Isla con la visita de un Ourense Baloncesto “de dulce”.
Veinte días sin haber baloncesto en el Pavelló Menorca es mucho tiempo, y ese periodo llega a su fin este sábado, en el horario habitual de las 19:30 horas, con uno de los partidos estrella de la jornada cuatro, en la que el Hestia Menorca recibe la vista de Club Ourense Baloncesto, líder de Primera FEB y equipo récord en valoración.
Un reto de nuevo mayúsculo para el conjunto de Javi Zamora, que está deseando ese reencuentro con la afición local y poder disfrutar junto a ellos de una gran noche de baloncesto, que además de positiva en el progreso del equipo también lo pueda ser en el resultado final, con mejor suerte que en la última cita en San Sebastián.
“Evidentemente te vas dolido por perder y, hacerlo después de ir 13 arriba, es duro. Sin embargo, durante el tercer cuarto, sobre todo, creo que hicimos los mejores minutos hasta ahora de la temporada, tanto en ataque como en defensa. Habrá muchos más parciales a favor y en contra durante las jornadas y lo que tenemos que intentar es analizar qué pasa en esos parciales para crecer a nivel táctico y mental”, explica Zamora.
El técnico madrileño se muestra muy satisfecho con la imagen de su equipo hasta la fecha, incluyendo los partidos y sesiones diarias de entrenamientos, destacando “la ética de trabajo del grupo” y catalogándola de “sensacional”: “Hay muchas cosas que mejorar, mucho trabajo de análisis, de intentar ir semana a semana siendo más competitivos. Tanto dentro del vestuario como el entorno del equipo, tratamos de no dejarnos guiar por los resultados, algo que nos ha funcionado en temporadas anteriores y lo está haciendo en ésta”.
No obstante, aprovechar el factor local es vital en la competición y diferencial en este compromiso en concreto, por lo que la parroquia menorquina ha puesto el ojo en dicho enfrentamiento y pretende apretar desde la grada para lograr una machada que recuerda a la de hace casi un año, contra el que, como este COB, fuera copando la primera posición de la tabla en ese momento, pulverizando registros y también equipo gallego. Hablamos de la victoria del Hestia frente al ya ascendido a ACB, Básquet Coruña, en la quinta jornada de la 2023/2024.
“Queremos que en Bintaufa sea muy difícil ganarnos; que, sobre todo, demos una cara súper competitiva a nivel de intangibles y de aquellas cosas que dependen de nosotros, como es poner esfuerzo, lucha y sacrificio. Intentaremos no hacerles el partido fácil y que no encuentren tan cómodos esos flujos de anotación para tener opciones de llevarnos el partido”, reafirma el entrenador y director deportivo de la casa.
Esa es la versión valiente y cargada de coraje que quiere proponer el Hestia Menorca, con la que poder afianzar así su feudo como uno de los destinos temidos de la categoría. Varios de los ‘cocos’ de la liga han sufrido e incluso claudicado en él, pero el siguiente en pasar por la Isla no se achantará en absoluto.
Club Ourense Baloncesto es uno de los equipos más en forma de lo que va de curso, “la sensación” en palabras del propio Zamora, que, augura, dará “muchas sorpresas” más: “Que vayan 3-0 y estén ahí arriba no es una racha o una anécdota. Detrás hay muchísimo trabajo, un gran entrenador con muchísima experiencia y una plantilla muy bien confeccionada, equilibrada y con muchas amenazas”.
La más importante, la de Benjamin Krikke, quien estará al otro lado del cuadrilátero un estelar duelo en la pintura entre los dos jugadores mejor valorados de la liga y primero y tercero en anotación, ambas tablas lideradas por Víctor Arteaga. Al pívot canadiense se le suma Diogo Brito, la otra gran incorporación de los orensanos este verano, mostrando una eclosión en su juego que le ha llevado a estar también en el top 10 en valoración, además del talento ofensivo de Aanen Moody, la dirección de Javi López y Rafa Lisboa, la intimidación y envergadura de Romaro Gill y el combo español en el 4 formado por Samu Rodríguez e Ignacio Rosa.
Otro equipo “muy sólido” con el que se encuentran los pupilos de Zamora en el camino. Una constante en esta liga para la que están preparados todos los efectivos del conjunto insular a excepción de Pablo González Longarela, quien sigue bajo exploración para conocer el alcance de su lesión.
“Complicados van a ser todos los partidos, cada uno con sus características. Tenemos que plantear un partido muy serio, tratar de ser muy sólidos, parar sus fortalezas y, a partir de ahí, crecer desde la defensa e intentar ser un poquito más constantes. Eso te da siempre un plus”, concluye Zamora.