Los locales buscan la cuarta victoria seguida frente a su público ante otro de los favoritos de la categoría para celebrar la ‘Diada del Poble Menorquí’.

Se cierra el telón de enero y de la primera vuelta con la visita de Monbus Obradoiro a Menorca, y lo hace en mitad de la festividad por excelencia de la Isla. Este próximo sábado, 18 de enero, a las 19:30 horas, Hestia Menorca celebra el ‘Partido de Sant Antoni’ junto a su pueblo habilitando el Pavelló Menorca como el epicentro de la fiesta simultánea a un partido “que seguro ofrece un gran espectáculo”, como apunta Javi Zamora, entrenador del cuadro insular, en la previa del encuentro.

La racha de tres partidos consecutivos en casa traducidos en triunfo gracias, en buena parte, al increíble ambiente de la afición y la comunión con el equipo, es el punto de partida para seguir acrecentando este periodo idílico de resultados: “Bintaufa se está convirtiendo en nuestro talismán. En los últimos partidos ha habido un ambientazo y esta jornada coincide con Sant Antoni y que el partido es en casa, con ya más de una veintena de asociaciones deportivas confirmadas. El temporal ha suspendido alguna de las acciones posteriores, pero seguro que lo compensaremos y trataremos de luchar para que nuestra afición esté orgullosa y podamos seguir despertando esta ilusión”.

Ímpetu y espíritu muy positivo el que rodea a la velada de la decimoséptima jornada, dejando a un lado el traspiés del último desplazamiento, en el que el Hestia sufrió la derrota más abultada de lo que va de temporada ante un Real Betis Baloncesto inspirado y majestuoso justo antes de llegar al partido previo al ecuador de la competición.

“El balance creo que es positivo por muchas razones. Hemos superado momentos difíciles en cuanto a lesiones, el equipo parece estar en números de permanencia y hemos tenido cuatro o cinco partidos más que se han resuelto en ese último minuto, o segundo, incluso. El equipo ha pasado página del partido de Sevilla y tiene que estar orgulloso del trabajo que ha hecho. Tenemos la plantilla más joven de la categoría, con un presupuesto modesto para la Liga que estamos viviendo, y estamos muy satisfechos, sobre todo, por como nos arropa la afición y como nos está empujando”, analiza Zamora.

Una juventud, tanto del proyecto como del ‘roster’, que contrasta con el próximo rival. Monbus Obradoiro atraviesa un año complejo y desafiante para un club ya clásico del baloncesto español, que llevaba afincado en la élite desde su ascenso en 2011, y que acumula experiencia, calidad y recursos para intentar retornar lo antes posible.

Y es que, a pesar de ocupar ahora mismo la séptima posición de la tabla en Primera FEB y de los muchos cambios a los que se ha visto expuesto la entidad gallega, especialmente, en la sección deportiva y durante los dos últimos meses, los compostelanos, con Félix Alonso ahora a la cabeza, están en proceso ascendente y clasificados para la Final Four de la Copa España: “Obradoiro es otro de los proyectos más potentes de la categoría, diseñado para recuperar su plaza en ACB. Un equipo súper completo que invita a centrarse en uno mismo”.

Siendo duda para el partido los dos ex jugadores del Hestia en campañas anteriores, Nacho Arroyo Varela y Oliver Stević, el fondo de armario visitante asegura competitividad en todos sus puestos, con hombres que no necesitan carta de presentación, como Sergio Quintela al ‘1’, escoltado por tiradores excelsos y jóvenes, como Brad Davison y Millán Jiménez, que se suman a la veteranía de Álvaro Muñoz, el conocimiento de la liga de Alejandro Galán y la potencia interior con Jacob Stephens, Strahinja Micović y Ondrej Balvin, su más reciente incorporación, llamado a ser “uno de los grandes jugadores de la categoría” tal y como apunta el técnico madrileño.

“El planteamiento de partido va a ser, una vez más, centrarnos un poquito en nosotros mismos,  poner el foco en las cosas que dependen de nosotros, estar sólidos en defensa, tratar de estar bien bajo el aro, ya que es un equipo que rebotea mucho, sobre todo cuando conviven dos grandes dentro de la pista”, comenta.

Por parte menorquina, plantilla al completo sana, con guiño especial de Zamora a su cuerpo técnico y biomédico por la preparación y el cuidado de los profesionales del club, y mensaje para terminar como filosofía a seguir para este enfrentamiento y las otras diecisiete finales que le esperan al conjunto insular: “Es una oportunidad única de disfrutar en Menorca de una liga como ésta y tenemos que luchar mucho para intentar seguir en ella, reseteando después de cada partido y poniendo el foco en el siguiente, que para nosotros es como si fuese el último. Así vamos a plantear cada semana para intentar llegar al objetivo”.

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