Menorca se rinde a la temporada de debut, más allá del resultado de esta jornada, y equipo y afición se emplazan para vivir juntos la próxima en el mismo escenario.
Se cierra el telón de la LEB Oro en el Pavelló Menorca tras la jornada 33, en la que Real Betis Baloncesto superó al Hestia Menorca por 75 a 84, ya con la melancolía de recordar los muchos buenos momentos que ha dejado la primera temporada del club en la categoría y con la certeza e ilusión de que el año que viene el equipo insular reeditará oportunidad de seguir disfrutando de todo lo que envuelve el proyecto en la Isla.
El duelo directo por la pelea de la novena plaza y seguir en la puja por el último puesto de los PlayOffs de ascenso comenzaba con varios condicionantes relevantes para los intereses del Hestia Menorca, que en las últimas horas perdía a Álvaro Sanz por molestias en la muñeca derecha y se quedaba con un único base puro en su roster, Clevin Hannah, quien también acusó dolencias físicas que le imposibilitaron jugar sus minutos habituales ni hacerlo en plenas condiciones.
Con esas circunstancias, el Hestia se plantó en el partido intentando reestructurar de la mejor manera posible las posiciones en el campo, siendo las no habituales para muchos. Todos ellos respondieron a las necesidades, empezando por la línea exterior, que empezó muy activa y lanzando sin pudor desde 6,75, con acierto de Pablo Suárez, Diego Alderete y Eric Demers hasta en dos ocasiones, aunque respondidos siempre por mejores porcentajes de los verdiblancos (15-20).
Al acecho, los menorquines siguieron intentando llevar a cabo el plan de partido siempre comandados desde dentro de la pista por un Oliver Stević nuevamente sensacional y por un Demers entonado hasta en los tiros más rocambolescos. El escolta americano acercaba a dos a los suyos para que Alderete consiguiera poner el empate a 31 en el ecuador del cuarto.
Hasta el descanso, mucha intensidad y nivel alto de contactos que derivó en una constante visita a los tiros libres dada la pronta entrada en ‘bonus’ de los dos equipos, provocando también la acumulación de faltas en muchos hombres importantes. Desde 4,60 cerró la primera mitad Alderete, con su sexto y séptimo tanto de la tarde, para dejar aún más cerca al Hestia (38-39).
En partido y determinados a pelear por dar una última alegría a la afición local, los chicos de Javier Zamora volvieron a ponerse por delante entrado el tercer cuarto, conteniendo bien el talento anotador de los sevillanos y aprovechando los tiros liberados desde el perímetro, hasta que Lucas Faggiano y Brooks De Bisschop descifraron el camino hacia la cesta contraria con un parcial de 0-8.
La brecha incluso fue a más para concluir el penúltimo periodo a pesar de las últimas canastas de Víctor Arteaga y Alderete, que no impidieron a los béticos verse bien posicionados para llevarse un triunfo muy valioso de Menorca. Eddy Polanco también tuvo gran parte de culpa en ello, uniéndose a la pareja argento-estadounidense en las cometidas insistentes y efectivas para colocarse doce arriba (52-64).
Hasta el +16 llegaron los de Bruno Savignani incorporando a todo su arsenal en dinámica anotadora, haciendo muy cuesta arriba la remontada, si bien el Hestia nunca dejaría de creer a golpe de triple. Cinco de ellos para la última intentona menorquina sustentada por el ánimo incondicional de la grada y uno más en la última posesión para concluir el periplo doméstico, con una victoria de espíritu para una Isla conmovida y que conmovió una vez más dejando su cariño y reconocimiento.
FICHA TÉCNICA:
HESTIA MENORCA (75): Clevin Hannah (1), Eric Demers (26), Diego Alderete (23), Oliver Stević (10), Víctor Arteaga (4) — Omar Lo (-), Javier Rodríguez (-), Golden Dike (-), Emil Stoilov (2), Pablo Suárez (9), Álex Tamayo (-).
REAL BETIS BALONCESTO (84): Lucas Faggiano (15), Joaquín Rodríguez (13), Eddy Polanco (18), Pablo Almazán (3), Brooks De Bisschop (11) — Pablo Marín (2), Ondrej Hanzlik (6), Adrià Domenech (-), Nedim Dedović (2), Kaspars Berzins (6), Rihards Kuksiks (8).