El Hestia Menorca remonta 23 puntos al CB Prat, pero Marc Blanch apuntilla la buena actuación catalana

Fotografía Antxon Castresana

Primera derrota del Hestia Menorca en el duelo de imbatidos con el CB Prat (72-78). Un partidazo para el aficionado, con el sabor agridulce local de una derrota que en el minuto 23 parecía incuestionable (32-55), pero que a 1:35 del final del partido se alejaba (69-68) tras culminar el quinteto menorquín una remontada espectacular, tras rebote ofensivo y canasta de Bruno Diatta (17 puntos i 13 rebotes). Parcial de 37-13. Sin embargo, la inspiración i experiencia de Marc Blanch, en las últimas posesiones, decantó el triunfo para los “potablaves”.

Xavi Hernández, Víctor Moreno, Alberto Corbacho, Urko Otegi y Bruno Diatta formaron el quinteto de salida. Triple del escolta madrileño a los trece segundos para inaugurar el electrónico, que mereció impulsiva respuesta de nuestro ex jugador Quim Salvans, con tres canastas consecutivas marca de la casa (3-6). Corbacho asestaba otros dos aciertos desde la larga distancia, en un intercambio de golpes marcado por la incomodidad que nos generaba la actividad física, la presión y defensa anticipada de nuestro adversario. No hubo grandes parciales, tampoco cuando los técnicos colocaron nuevas piezas sobre el tablero de Bintaufa. 15-11 sería nuestra máxima ventaja durante el partido. Oriol Pagès sí decidió parar el partido tras un 0-7 (16-20, a 1:09). Un rebote ofensivo de Drew y una asistencia del norteamericano para que Julio de Assis hundiera la bola nivelaron de nuevo la cita. El cuarto se cerraba con dos tiros libres de Marc Blanc (20-22).

Espeso inicio, el del segundo acto. Tardamos casi tres minutos en anotar y un triple de Domènech nos generaba cierta inquietud (22-29, a 6:33). El Prat empezaba a castigarnos con el rebote ofensivo y anotaciones cómodas tras recuperación de balón, en base a defensas alternativas. El quinteto catalán dibujaba así el primer parcial serio, de 0-10, para un 22-34 a 4:31 para alcanzar el vestuario. El Hestia Menorca se hallaba ante un escenario inédito en los cuatro partidos anteriores… y nos costó asimilarlo y gestionarlo. Pese a un 2+1 de Diatta, el adversario iba lanzado y no hallamos la fórmula para frenarlo. 30-45 al descanso, parcial de 10-23.

Fotografía Antxon Castresana

La vuelta al parquet fue de todo, menos alentadora. March Blanch confirmó que, a sus 38 años, sigue disfrutando de este juego y nos asestó un baño de realidad con 8 puntos (2 triples) consecutivos. El partido se nos iba y alcanzó su punto álgido tras una falta antideportiva señalada a Urko Otegi. El donostiarra arrastraba una falta técnica del segundo cuarto y, por ende, fue descalificado, aún con más de 17 minutos por jugar y la máxima desventaja en el electrónico, -23 (32-55, parcial de 2-10, a 7:20). Entonces el equipo se junto sobre la pista y algo empezó a cambiar. Acortar diferencias pasaba por recuperar nuestra mejor versión en pista trasera -inédita hasta entonces- y a partir de ahí, canasta a canasta, logramos generar dudas en el adversario. Triple de Corbacho y “alley-oop” de Guebert… minuto de Dani Miret (41-57, a 3:49). Ni una nueva falta técnica, ahora para Pitu Jiménez, nos desvió de nuestro objetivo: entrar en el partido. Y cerramos el tercer cuarto con la sensación de haberlo conseguido, pese a que Blanch puso de nuevo su rúbrica en la última acción (48-62; parcial de 18-17).

Diez minutos en baloncesto es mucho… y en Bintaufa, con el apoyo de la afición, se pueden hacer muy largos, eternos. Saludamos el inicio del último cuarto con dos triples de Drew y Pitu. La locura se desataba en la grada con un mate estratosférico de Guebert. Avanzábamos hacia nuestro objetivo (58-64, a 4:47). Evidentemente, el Prat tenía sus recursos y, ni que fuera a cuentagotas, los gestionaba para resistir nuestro mejor momento de juego. Mientras atrás las concesiones era mínimas y el dominio del rebote máximo, Pitu dirigía magistralmente las operaciones y de sus asistencias surgían más puntos. Diatta y Moreno se organizaron para sumar entre ambos una secuencia de 11 puntos que nos permitieron culminar la remontada, esto es, ponernos por delante: 69-68, a 1:35 del final. Parcial de 37-13 (21-6 en el cuarto), tras sufrir una máxima desventaja de 23 puntos. Recuperación del espíritu competitivo y reacción extraordinaria. Carles Marzo frenó la sangría (69-70, a 1:17). El minuto siguiente nos mantuvimos firmes en defensa, pero perdimos el acierto en la zona contraria. Tiros liberados de tres, de media distancia, penetraciones o bajo canasta no hallaron su premio. El Prat respiró desde el tiro libre: 4 de 4 para el 69-74, a 10” segundos del final. Corbacho abrió una última ventana para la esperanza (72-74, a 6”), pero Marc Blanch culminó una actuación como la que antaño le valió celebrar en esta pista, como local, un ascenso a la ACB. Resultado final, 72-78 (parcial 24-16).