El Made in Menorca hicimos frente hasta donde alcanzamos a un rival notable, experimentado y talentoso, el Castellbisbal, que desplegó su habitual versión y supo aprovechar y castigar nuestros errores tanto en el nacimiento del partido como en su resolución (77-89).

Por nuestra parte, de entrada valorar, agradecer y aplaudir el esfuerzo y compromiso que está demostrando este grupo en un mes harto complicado por todos los episodios de carácter físico que hemos sufrido.

La lista de descartados fijos (Franco Acosta y Jesús Vargas, inviable su concurso) podría haber sido más larga, pero en un ejercicio de pundonor, aguante y responsabilidad ante el tramo final del calendario, ha habido un grupo de irreductibles que han puesto por delante al Made in Menorca frente a las dolencias y molestias que arrastran desde hace semanas.

En otro momento, desde la prudencia, la prevención y el egoísmo individual hubiera sido aconsejable parar. Ellos no lo han hecho. Gracias a los Pitu, Dani, Ángel, Adrià, Sergio… Sois grandes, ¡y lo sabéis!

Y en esas estábamos, que entramos en el partido con el pie izquierdo. Acumulamos una colección de errores bajo el aro y desde el tiro libre, al tiempo que el rival catalán hacía lo que mejor sabe, atacar a un alto ritmo, con descaro y con un destacado porcentaje. Casi sin darnos cuesta estábamos abajo 0-11 (5:52). Nuestro ‘coach’ Miguel Ángel Hoyo paraba el partido. Pero ni por esas. Alcanzamos una máxima desventaja de 0-16, a 3:24 de concluir el primer cuarto. Desde la línea de los 4,60 entramos en partido, el acierto de Piedra y Muñoz nos devuelve a la realidad competitiva y la primera canasta en juego del ‘capi’ Muñoz –a 42 segundos del final- nos revive (9-24). Habrá partido.

El estreno del segundo acto no es del todo alentador. La dinámica del Castellbisbal es difícil de parar y Éric Mañés, tras un rebote ofensivo, no lleva al borde del abismo (11-30 a 6:27 del descanso). Pero el equipo no se rinde, ajusta detalles, tira de orgullo y a partir de la picardía de Pau Pons y especialmente el acierto de Dani García y Ángel Piedra -29 y 24 de valoración final- no metemos en el partido pese a la resistencia catalana (20-32, 22-39, 30-44). ‘Maki’ García reafirma el ‘aquí estamos’ con un triple marca de la casa a 3 segundos del intermedio (33-44).

A Jan Orfila las faltas (3) apenas le han permitido estar 3:29 en pista. Le señalan la cuarta al 1:53 de iniciarse el tercer periodo. Pero nuestro grandullón responde con sus mejores argumentos deportivos. 9 puntos casi consecutivos (43-50), solo alterados por la autopista que hacia nuestra canasta generamos con pérdidas que especialmente Terrelle Green (23 puntos) nos castiga: 43-54. Pero no bajamos la marcha. Otro triple de Dani nos acerca hasta el 50-54 (a 2:32). Sin embargo, el partido entra en una dinámica de parones, ofuscación y tensiones que acabarán favoreciendo al Castellbisbal entre una maraña de faltas técnicas y antideportivas. 55-65 final del tercer cuarto.

Lo intentaremos hasta del final, pero el acierto catalán es colosal. La mejor versión de Félix López (15) desactiva cualquier opción de acercarnos de nuevo en el electrónico. La cita discurre por la vía del tiro libre, con un mejor acierto que en jornadas anteriores, pero insuficiente para optar al triunfo. 77-89 y descartados definitivamente de la lucha por las plazas del ‘play-off’.

Pero aún nos quedan tres interesantísimas jornadas por disputar y la opción de la “medalla de bronce”. Nos la jugamos directamente este sábado (16.15 horas) en la pista del Salt (Girona), que nos aventaja en una victoria. En el Poli de Maó les superamos 64-58. Vamos a seguir disfrutando del baloncesto, del Made in Menorca y de esta categoría que nos abre un mundo de posibilidades para crecer y desarrollarnos a nuestros baloncestistas menorquines.